Guasca: sus deliciosas aguas calientes

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Guasca: sus deliciosas aguas calientes

Guasca es un pueblito grande y muy bonito, cuenta con varios atractivos como sus cultivos de fresas, su gran iglesia en el parque central, sus deliciosas aguas calientes y muchas otras.

Es un municipio ubicado muy cerca de Bogotá, se puede coger transporte sobre la 72 con 15, cerca de la universidad pedagógica, sale como a $12.000 pesos el pasaje y el camino dura aproximadamente 1 h y media, saliendo por la calera, siendo de clima algo frío, depende la época pero la mayor parte sí.

Mi experiencia en Guasca y sus deliciosas aguas calientes

Ya he visitado varias veces este lugar, en esta ocasión, una amiga me llamo que estaba celebrando su cumpleaños allí y decidí ir sola e integrarme a sus amigos. 

Al llegar al pueblo ya era algo tarde, así que compre algunas cosas de comer, ya que mi plan era quedarme acampando esa noche sola, por el hecho de que mi amiga solo estaba de pasadía con su familia.

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Recorrido desde Guasca a la Termal

Le compré también un obsequio y emprendí mi camino, del pueblo de Guasca a la termal son casi 35 a 40 min a pie, es un camino mitad pavimentado y la otra mitad es piedra, hay muchas fincas al los costados y entre ellas están las que cultivan fresas, es hermoso como las ponen a lo alto y uno puede observar todo el proceso e instalación de esos cultivos. 

Además, muchas veces puedes comprar las fresas allí directamente, hay que saber qué temporada es para pasar en época de cosecha.

Guasca: sus deliciosas aguas calientes

Durante el recorrido de Guasca a las aguas calientes

En recorrido también puedes ver las montañas y paisajes lindos que ofrece Guasca, muchas otras he visto animales como corderos u ovejas que tienes los campesinos, hay varios caminos que llevan a fincas más cercanas, hay que seguir la vía principal para no perderse, al pasar algunas tienditas que también ofrecen servicio de camping.

Así mismo Guasca y sus Aguas calientes son un punto turístico que cuenta con una enorme termal, también ofrecen servicios como spa, piscinas romanas, chorros de agua, turco y jaccusi, además de la zona de camping corriente y una zona tipo glamping, pero en casitas que parecen tubos.

Todo esto tiene diferentes precios, encima te ofrecen cabalgatas por la zona y tiene en el lugar una mini granja, hay pavos, patos, gallinas y caballos por allí desde $45000 pesos la entrada según las actividades que quieras hacer y también depende si quieres pasar la noche acampando.

Mi estancia en Guasca y sus aguas calientes

Al llegar te dan una manilla y te piden guardar todo en un casillero, si llevas camping como hice yo, pues guardas todo hay, la zona de camping es amplia, cuenta con asaderos pequeños para hacer fogatas. 

Guasca: sus deliciosas aguas calientes

Al llegar armé mi camping, fue difícil porque había mucho viento, tuve que correrlo dos veces de lugar y asegurarlo con cuerda para que el viento no se lo llevara, eso que es grande y tenía cosas adentro, después de esto, me fui a buscar a mi amiga a la zona de termal, vi que estaba reunida con su familia, le entregue el obsequio y procedí a meterme a la termal.

 Sus aguas son oscuras, muy calientes y cuenta con un rodadero y al lado un pequeño jaccusi para niños.

Guasca: sus deliciosas aguas calientes

Después de un rato me despedí de mi amiga y, ya que yo había comprado algo de cenar, me fui a la carpa a comerlo, ya estaba oscuro, eran como las 7 pm, y me quedaría completamente sola o bueno junto con los animalitos, el lugar tiene bastantes cámaras así que me sentí segura.

En la carpa acomodé todas mis cosas a los laterales para que no entrara tanto frío, había comprado algunos panes, yogur y unas papitas, me cubrí muy bien los pies y empece a leer el libro que había llevado, al cabo de un tiempo empece a sentir mucho frío y decidí taparme con todo lo que había llevado e intentar dormir.

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Guasca: sus deliciosas aguas calientes

Actividades que realice

Yo había pagado un plan con desayuno incluido, entonces apenas desperté me fui por él, la zona de comidas estaba bien decorado, así que mientras me lo traían recorrí el lugar, también saque mi libro y seguí leyendo, escuchando los cantos de las aves y los relinches de los caballos.

Al cabo de unos 15 min me trajeron un sanduche con un jugo, este no estaba como esperaba, pero en fin era comida, volví a la carpa a descansar otro rato, pues ya había salido el sol y podría dormir mejor, estuve unas dos horas allí y recobre algo de energía, así que decidí ir a nadar a la termal, era viernes así que no había tanta gente, lo malo que algunas áreas como el turco estaban cerradas.

Guasca: sus deliciosas aguas calientes

Estuve unas cuantas horas en la termal casi toda la mañana, sus aguas son deliciosas, producen un efecto relajante y ayuda reducir los dolores musculares, me lance del rodadero, me fui a la zona de chorros, converse con gente del lugar, y en la tarde llego un grupo de personas de la tercera edad, así que los vi un rato disfrutar. 

Guasca: sus deliciosas aguas calientes

Entre esas personas casualmente estaba mi ex suegra, así que con algo de pena fui a saludarla, me contó que su hijo ósea mi ex había llevado ese grupo por medio de una fundación allí a descansar y por esparcimiento y preciso yo estaba allí ja, ja, ja, pero bueno.

Al cabo de un rato lo vi a él, lo saludé y me fui a mi carpa a cambiarme y alistar todo para volver a Bogotá, él me dijo que me devolviera con ellos en el bus, pero decidí volver por mi cuenta y emprender el camino a pie hasta Guasca y allí tomar un bus hacia la ciudad.

De vuelta a casa desde Guasca y sus deliciosas aguas calientes

Llegue a Bogotá a eso de las 7 pm, el bus de vuelta me dejo de nuevo por la 72, y allí debía tomar otro transporte a casa de casi 45 min, me gusto haber estado sola y poder haber aguantado el frío de noche, por mí misma supe como afrontar eso y también supe que esos caminos nos los había olvidado y podría volver siempre que quisiera, ahora tendría la experiencia y más precaución, llevaría otro abrigo para la noche.

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